Todos sabemos que nada proporciona más seguridad que tener un colchón de dinero para emergencias en el banco, ahorrar para compras importantes en lugar de recurrir al crédito, pagar los seguros que necesitemos o hacer que crezca nuestro fondo de pensiones y/o fondo de inversión.
Pero, sobre todo en los tiempos que corren, mucha gente se pregunta cómo pueden conseguir ese tipo de ahorros para el futuro cuando apenas les alcanza el dinero para llegar a fin de mes. Pero ahorrar comienza de la misma forma que hacer un viaje de miles de kilómetros: dando el primer paso (y, en este caso, un paso sencillo).
Aquí tienes cinco maneras de empezar a ahorrar sin hacer sacrificios demasiado dolorosos:
1. Transferencia Automática del 1%
La mejor forma de ahorrar dinero es nada más recibir un ingreso, recién llegado a nuestras manos. Eso es fácil de hacer estableciendo una transferencia de fondos automática a tu cuenta de ahorros o plan de pensiones. De esa forma, no caerás en la tentación de gastártelo.
Comienza por establecer una transferencia automática del 1% de tu sueldo. Aunque pueda parecer que un 1% ni siquiera merece semejante esfuerzo, sigue siendo más de lo que ahorrarías si no lo hicieras. Una vez que te acostumbres a disponer de un poco menos de tu dinero, puedes ir incrementando tus ahorros en otro 1% o más. Apartar el 1% no se nota, pero con el tiempo todo suma.
2. Guardar el Cambio
Es el truco más viejo del mundo, pero sigue funcionando. Ten en casa una hucha o una jarra donde guardar las monedas sueltas y deposítalas todas en tu cuenta de ahorros una vez que el recipiente esté lleno.
Apenas notarás un cambio en tus finanzas, y estarás añadiendo dinero a tus ahorros. Puedes conseguir una mayor motivación si colocas una etiqueta con el objetivo que te hayas marcado.
3. Reducir el Pago de Comisiones en Cajeros
Si sacas dinero desde los cajeros automáticos de forma habitual, estarás al tanto de que las comisiones pueden llegar a sumar una buena cantidad. Si no quieres renunciar completamente a esta práctica, prueba a reducir a la mitad la cantidad de veces que pasas por el cajero.
Por ejemplo, si tienes la costumbre de retirar dinero dos veces por semana, hazlo una sola vez sacando el doble y evitando la segunda comisión del cajero. Y ya que estás en ello, aprovecha para transferir la cantidad que te has ahorrado en comisiones a tu cuenta de ahorros. ¡Listo! Has gastado la misma cantidad de dinero pero, en este caso, has conseguido ahorrar.
4. Seguir Pagando los Préstamos
No hay nada más satisfactorio que pagar la última letra de un préstamo, especialmente de grandes compras como la casa o el coche. Sin embargo, esta no es razón para dejar de hacer el “pago”.
En lugar de eso, como ya te has acostumbrado a vivir sin esa cantidad, puedes redirigir el dinero a tu cuenta de ahorros, tu fondo de inversión o tu plan de pensiones. Así podrás conseguir un colchón de ahorros extra sin sentir que estás pasando grandes privaciones.
5. Deposita el Dinero Extra
Algunas veces recibimos un dinero que no esperábamos – una devolución de impuestos, un pequeño premio en la lotería, un billete que te encuentras en un bolsillo o en la calle – y es algo realmente agradable. En lugar de gastarlo sin más, podemos ingresarlo en nuestra cuenta de ahorros. Es dinero con el que no contabas, así que no lo echarás de menos.
Y si la cantidad es lo suficientemente importante, puedes darte un capricho antes de poner el resto a buen recaudo. De esta forma podrás disfrutar un poco de tu buena suerte.
En Resumen
No importa cuál sea tu presupuesto, siempre hay una forma de ahorrar. Se trata de encontrar un poquito de dinero aquí y allá que no te vaya a suponer pasar privaciones.
¿Has probado alguno de estos métodos de ahorro? ¿Te ha funcionado?