En el sector de las entidades crediticias, se ofrecen hipotecas malas, hipotecas regulares e hipotecas buenas. Pero, ¿cuáles son las mejores hipotecas?
Eso es difícil de dilucidar, ya que el concepto de mejor lleva una elevada carga de subjetividad que impide ofrecer un juicio de valor éticamente válido. Lo que sí parece claro, sin embargo, es que cada persona en busca de una hipoteca tiene a su alcance la posibilidad de obtener una hipoteca que se ajuste mejor a sus necesidades.
Por tanto, las mejores hipotecas son todas aquellas que se adecuan a las necesidades individuales del prestatario. Para ello, el potencial adquiriente de la hipoteca se debe plantear que aspecto de la hipoteca cobra mayor importancia para él.
Una vez decidido ese aspecto, se puede acudir a cualquiera de los innumerables comparadores de hipotecas que ofrece el mercado, en aras de encontrar las mejores hipotecas para los intereses individuales del ciudadano en busca de una hipoteca.
¿Qué aspectos pueden hacer de una hipoteca la mejor?
- El tipo de interés: sin duda, se trata del rey de las hipotecas. Las mejores hipotecas serán aquellas que ofrezcan un mejor tipo de interés. Pero, ¿qué tipo de interés? ¿el tipo de interés de referencia o el diferencial? Porque un tipo de interés de referencia bajo puede llevar oculto un tipo diferencial elevado, mientras que un tipo base elevado puede ir compensado con un variable bajo. Por ello, las mejores hipotecas serán aquellas que logren el equilibrio entre estos dos aspectos, siempre y cuando se tenga en cuenta la decisión de la modalidad de tipo de interés que se va a adoptar, esto es, tipo de interés fijo, variable, mixto…
- Comisiones de cancelación: tanto la cancelación total como la parcial, son las grandes desconocidas de los préstamos hipotecarios. Poca gente, parece darse cuenta de la importancia de este aspecto, que cobrará mayor importancia en aquellos particulares que tengan pensado acabar con su deuda mucho antes de que los plazos concluyan. Las mejores hipotecas serán, por tanto, aquellas con unas comisiones de cancelación más bajas, independientemente del tipo de interés.
- Plazos de amortización: para determinadas personas, el hecho de que una hipoteca tenga un plazo de amortización más elevado puede llevar a convertir esa hipoteca en la mejor, ya que al estar basada en un plazo de amortización más elevado, la cuantía de las cuotas mensuales sería menor.
Por tanto, se puede llegar a la conclusión de que el concepto de “mejores hipotecas” es totalmente subjetivo, ya que hay que lograr un equilibrio entre todos los aspectos que han de ser tenidos en cuenta a la hora de valorar una hipoteca.