Una vez analizada la realidad, el día a día de nuestra sociedad, uno tiene la percepción de que cada vez se constituyen menos hipotecas por un doble efecto que suma en el mismo sentido. Por un lado, cada vez menos gente se plantea la compra de una vivienda, es decir, está cayendo la demanda efectiva de compra de pisos, y, por otro lado, los bancos y entidades financieras en general, siguen teniendo congeladas las hipotecas. Por ello, no sorprende los datos que ha hecho públicos esta semana el Instituto Nacional de Estadística en los que se certifica el descenso de las nuevas hipotecas registradas en el mes de febrero en un 8,8%, con respecto al mes de febrero de 2010, en lo que significa ya el décimo mes consecutivo de descensos.
Durante este mes de febrero, el importe medio de las nuevas hipotecas registradas ascendió a los 122.749 euros, cifra que supera en un 4,1%, al mismo valor en febrero de 2010, y en poco más de un 3%, al valor medio de las hipotecas constituidas durante el mes de enero de este mismo año 2011.
Sin embargo, el valor medio de las hipotecas registradas en nuestro país, asciende, con datos de febrero de 2011, a los 128.243 euros, lo que supone un descenso de poco más de un 5%, con respecto a febrero de 2010, lo cuál vendrá generado, sin duda, por el doble efecto del que hablábamos en el primer párrafo.
Por lo que se refiere al desglose de los créditos hipotecarios concedidos en función a la entidad financiera que se trate, vemos que, a pesar del proceso de reestructuración del que están siendo víctimas en estos momentos, las cajas de ahorros todavía se mantienen como las entidades que más préstamos hipotecarios concedieron, con un 50,8% del total, seguidas de los bancos, que se tuvieron que conformar con el 37,2% y el resto de entidades financieros, con un residual 12%.
En definitiva, por una vez, y sin que sirva de precedente, la percepción de la realidad se ve corroborada por las estadísticas que vienen a confirmar que el sector inmobiliario está todavía muy lejos de iniciar su proceso de recuperación definitivo.