El sector bancario español se encuentra en plena reestructuración tras la dura crisis económica y al parecer, empieza a consolidarse a la hora de presentar unos niveles de solvencia aceptables, según las medidas adoptadas y directrices exigidas desde el organismo regulador del Banco Central Europeo –BCE- Por todo ello, los inversores y ahorradores en la actualidad que se planteen buscar una entidad bancaria para solicitar un crédito o depositar su dinero se suelen llegar a plantear la siguiente cuestión: ¿Cómo debo elegir a mi banco?
Dentro de la zona euro en un país como España, el diverso mercado bancario nos puede permitir realizar comparativas, investigaciones y evaluaciones, para poder descubrir cuál es el banco que más se pueda adaptar a nuestras propias necesidades y recursos dinerarios. Aquí en Consejos de Bolsa y como siempre en el lenguaje más coloquial posible, vamos a intentar explicar dos distintas situaciones financieras que nos puedan llegar a determinar que conceptos prioritarios deberemos tener en cuenta para que nuestra elección sea la más acertada:
- Cuando queremos pedir un préstamo: Si nuestra idea es pedir un crédito existen muchos tipos diferentes como son los hipotecarios, préstamos personales, de consumo, para la compra de vehículos o simplemente para realizar el viaje deseado. Para que tengamos claro dónde nos metemos, deberemos solicitar a la entidad bancaria explicación clara y sencilla de los plazos de pago, tasas, comisiones, y en su caso, las garantías exigidas que suelen ser diferentes en cada banco consultado. Así mismo, es importante tener en cuenta que para algunas entidades “es normal” la inclusión de gastos o cargos para el cliente en concepto de estudios financieros a la hora de la concesión del crédito solicitado, por lo que las comparaciones entre bancos distintos nos indicará que es lo más beneficioso para… ¡Nuestros intereses!
- Cuando queremos depositar o invertir nuestros ahorros y capital: Es la otra cara de la moneda bancaria, ahora es cuando el cliente tiene la crucial necesidad de verificar la solvencia de la entidad bancaria, código de buenas prácticas y respaldo del Banco de España. Tras ello, deberá observar las siguientes prestaciones operativas para el futuro cliente, como son: la distribución de sus redes de oficinas, cajeros electrónicos, horarios de consultas, tarjetas de crédito, costes de transacciones entre cuentas propias, a otras cuentas externas y especialmente, si le asignan un asesor/consejero financiero personal dentro de la entidad.
CONSEJOS PARA LA ELECCIÓN ACERTADA DEL BANCO
La pérdida de nuestro precioso tiempo en la búsqueda de la entidad bancaria más adecuada a nuestra condición financiera y de recursos dinerarios, siempre será recompensada a medio-largo plazo por la tranquilidad de sentirse respaldado y aconsejado por buenos profesionales del sector. El análisis y comparativa bancaria nos llevará a encontrar las mejores tasas de ahorro, los menores gastos operativos, los mejores productos financieros (según perfiles inversores o de ahorro) y a saber distinguir cuando es aconsejable mantener nuestro dinero “a ritmo lento y poco riesgo” o por el contrario, proceder a realizar inversiones para conseguir mayores rentabilidades.
Deberemos tener muy presente que todas las entidades bancarias del mundo se han creado básicamente para…¡¡Ganar dinero!!… Por tanto, la idea principal que debe acompañar a sus futuros clientes es la de conseguir buenos servicios, atención, mejores consejos y asesoramiento, además, comisiones mínimas y costes reducidos. En definitiva, cuando un familiar o amigo nos plantee la muy común y relevante cuestión sobre: ¿Cómo debo elegir a mi banco?, siempre le podremos responder cordialmente… ¡¡¡ Comparando, comparando y comparando!!!
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La frase elegida para este artículo nos la ha recomendado nuestro amigo y seguidor de comparativadebancos, Juan Liarte, desde la Costa Cálida en España y dice así:
No estimes el dinero en más ni en menos de lo que vale, porque es un buen siervo y un mal amo.
Alejandro Dumas