Los mercados de valores empiezan el año 2014 marcando nuevos máximos y con nuestro índice más representativo de la Bolsa española IBEX35, por encima de los 10178 puntos, si además, le añadimos que la prima de riesgo hispana ha bajado por debajo de los 200 puntos. Quizá sea el momento de plantearse los pequeños y medianos inversores si están preparados para realizar un buen trading este año desde el punto de vista psicológico o técnico.
La psicología inversora en el trader es tan importante como la preparación técnica, el estudio de gráficos o los análisis fundamentales de cualquier empresa cotizada, la inteligencia personal del inversor deberá estar preparada para solventar los distintos inconvenientes que surjan por el camino de la inversión, además de aprovechar factores tan humanos como son: La coherencia, el pensamiento, la comprensión, o la actuación metódica ausente de influencias externas. Son muchas las circunstancias que nos pueden afectar a la hora de tomar rápidas decisiones de compra-venta de títulos y también está en nuestra mano conocerlas y saber reaccionar de forma adecuada para evitar las temidas pérdidas dinerarias en los mercados.
Para ser conscientes de algunos errores psicológico-prácticos más comunes de los ocurridos en la Bolsa a la hora de participar, mediante la operativa de trading, veamos algunas cuestiones que deberemos subsanar en pos de una cada vez mejor formación inversora:
- ¿El problema es la estrategia o soy yo? Algunas veces el inversor menos avezado comienza a cambiar de estrategias dado los errores cometidos en el plan de inversión previamente diseñado. La solución teórica de este problema radica en aprender de los errores, corregirlos y aprovechar las experiencias en el futuro más inmediato. Solo cuando pasado un tiempo se demuestren erróneas las distintas estrategias, podremos llegar a pensar que el fallo puede ser…¡Nuestro!
- ¿Me dejo llevar por las emociones a la hora de operar? Las emociones son lógicas para todo ser humano, pero traducido a los mercados de valores, éstas pueden influir negativamente en el resultado final dado que es muy común que algunos inversores al realizar nuevas operativas de trading, “espoleados” por el anterior mal resultado, les puede llevar a buscar un “ánimo de venganza”, mediante la inversión de un capital superior sin tener un adecuado y meditado plan de inversión.
CONSEJOS PARA SER UN TRADER INTELIGENTE
El primer consejo puede ser olvidarse de varitas mágicas, el azar o el esoterismo inversor basado en los astros, los calendarios lunares e incluso las estadísticas de series sobre las cotizaciones históricas. El mercado de valores, está diseñado para ganarnos con poco que le demos algunas facilidades, por lo tanto, el segundo consejo es estudiar y estudiar (cuanto más mejor), ya que una buena formación es parte importante de la clave del éxito inversor. Otro consejo es, reaccionar lo más fríamente posible ante los movimientos del mercado, lo que a base de experiencia y educación financiera se puede conseguir. Un cuarto consejo podría ser, actuar de forma rápida una vez evaluada y comprendida la situación bursátil.
La habilidad e inteligencia de un trader no solo estriba en descubrir y adelantarse a los movimientos bursátiles, sino más bien, en saber utilizar de forma conveniente su psicología inversora, conocimiento de sus limitaciones y capacidad de adaptación a los frecuentes cambios imprevistos del mercado.
La apuesta inversora debe ir acompañada siempre de una correcta utilización de nuestra capacidad para desarrollar pensamientos de calidad y dentro de ella, cabe un concepto muy importante de reconocimiento personal de humildad que consiste en pensar lo siguiente: “Solo sé, que todavía me falta mucho por aprender”. Ese es el buen camino para poder encontrar: “Cómo llegar a ser un trader inteligente”.
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La frase elegida para este artículo dice así: “Nada es más contrario a la curación que el cambiar frecuentemente de remedio”, Séneca.