Buscar empleo siempre ha sido como montar en una montaña rusa, pero con el panorama económico actual, la montaña rusa está situada en el parque de atracciones del Infierno. Supongo que en esto podemos estar todos de acuerdo.
No tenemos más remedio que montarnos en ella, apretarnos bien el cinturón y mantener la esperanza de que cuando todo termine aún estemos en posesión de nuestra autoestima y nuestras facultades mentales.
Sin olvidar, por supuesto, que al finalizar el viaje deberíamos haber conseguido un trabajo en el que nos paguen lo suficiente para poder darnos ciertos lujos en la vida, como por ejemplo el de comprar comida.
Lo malo es que a muchos de nosotros no nos han enseñado nunca a buscar un trabajo, no digamos ya el trabajo más adecuado, por lo que es muy fácil que terminemos cometiendo errores y saboteando nuestra propia búsqueda.
Hay muchos errores que podemos cometer, pero en este artículo analizaremos sólo cuatro de ellos:
1- Empezar la búsqueda sin tener un plan o una estrategia
¿Qué pasaría si hiciéramos nuestras inversiones o nos fuéramos de vacaciones sin tener algún tipo de plan previo? Es muy probable que nada bueno. Entonces, ¿por qué pensamos que esta estrategia va a ser efectiva a la hora de buscar un empleo? Lo cierto es que queremos sentirnos productivos y nos lanzamos a buscar un empleo esperando «conseguir» algo.
Solución: Prepara un plan del mismo modo que lo harías en cualquier otro ámbito importante – y no tan importante – de tu vida. Determina qué tipo de trabajo deseas conseguir y después piensa en las fórmulas más adecuadas para lograrlo. Ten en cuenta los horarios en los que estás disponible, las conexiones personales que puedes utilizar, cómo contestarás a preguntas clave en las entrevistas, etc. Es muy poco probable que se presente un trabajo en la puerta de casa.
2- No saber qué valor podemos aportar a nuestro empleador
¿Por qué debería el empleador contrate? ¿Qué puedes aportarle? ¿En qué empresas has tenido éxito en el pasado? ¿Qué características valoraban más en ti tus antiguos jefes? ¿Cuándo has fracasado y que has aprendido de ello? En una entrevista de trabajo te van a pedir que hables de ti, y no puedes quedarte en blanco.
Por supuesto, estas preguntas requieren preparación y práctica, pero mucha gente piensa que puede contestarlas sin más. Si no somos capaces de contestar estas y otras preguntas de una forma centrada y atractiva, nuestras probabilidades de encontrar un trabajo se verán muy reducidas.
Solución: Haz un borrador con las respuestas a estas preguntas, repásalas con alguien que conozca tu trayectoria profesional y practícalas con personas que vayan a ser completamente sinceras a la hora de valor tus respuestas.
3- Depender de la tecnología y evitar el contacto cara a cara
La gente contratada a personas, no a archivos adjuntos en Word o PDF. Si no puedo verte, oírte u obtener una impresión personal acerca de ti, me va a costar mucho imaginar cómo podrías encajar en mi empresa. Es muy fácil rechazar a alguien a través del correo electrónico, por lo que esta estrategia es sólo válida en ocasiones para conseguir trabajos online.
Además, si tu currículo está apilado junto con otros 300 más, imagina lo fácil que es pasarlo por alto.
Solución: Ajusta tu estrategia para que incluya entrevistas cara a cara o reuniones en grupo a lo largo de la semana. Dos tercios (o más) de la gente que consigue un trabajo lo hacen a través de alguien al que conocen o que han conocido mientras buscaban empleo.
4- No tener en cuenta las necesidades del empleador
Cuando estamos buscando un trabajo, es muy fácil pensar sólo desde nuestra perspectiva. Tomar en consideración cómo responderás a ciertas preguntas, cómo te vestirás o en qué aspectos te vas a centrar durante la entrevista. En general, la gente que busca empleo habla más de lo que escucha.
Solución: ponte en la piel del empleador. El propósito de una entrevista es encontrar a la persona que se ajuste a las necesidades del puesto que está vacante. Es por esto que debemos tener muy en cuenta lo que nos piden en la oferta de trabajo, cuál es la descripción del puesto y qué detalles hemos podido descubrir acerca de él, qué preguntas se nos hacen o cuáles son las necesidades y retos que tiene la empresa.
Está comprobado que hay ciertas técnicas y habilidades que son efectivas a la hora de conseguir un empleo, por lo que si sabemos cuáles son y las practicamos seremos mucho más efectivos.