Muchas personas tienen una Cuenta Corriente (operativa) y es posible que también una Cuenta de Ahorro, sin embargo, estos productos bancarios tienen unas características que no todo el mundo conoce y en esta entrada vamos a analizarlas, utilizando el ejemplo de dos de ellas, la Cuenta Sin Nómina y la Cuenta Naranja de ING.
La Cuenta Corriente (operativa), el cajón de sastre
Una Cuenta Corriente es un depósito a la vista, que además, permite ciertas operaciones de cobros y pagos. Hoy en día se han puesto de moda las que no tienen comisiones, como la de ING que además, no cobra tampoco por transferencias, como podrás comprobar en las condiciones legales de este enlace. Con ella puedes operar o domiciliar recibos, entre otras cosas; pero eso sí, a cambio de estas ventajas, no suelen ofrecer remuneración. Por otro lado suelen estar asociadas a una tarjeta de débito como la Tarjeta VISA de ING, que tampoco cobra comisiones, como nos indican en el contrato que puedes revisar aquí.
Esta es la cuenta que utilizaremos para realizar traspasos en caso de tener una hipoteca, un depósito a plazo o una Cuenta de ahorro como la que mostramos en el siguiente apartado. En definitiva, es ese cajón de sastre donde podemos llevar a cabo nuestro «día a día», en la oficina, el cajero e incluso on line.
La Cuenta de Ahorro, la prima muy hermana
En el pasado, no hace tanto tiempo, existían unas cuentas que llamábamos «libretas de ahorro”, siguen existiendo, pero cada día son menos demandadas. El motivo es que hoy lo más sencillo es disponer de una Cuenta de Ahorro, como la de la entidad holandesa y asociarla a una Cuenta Corriente u operativa, de esta manera tenemos las ventajas de ambas. Esta cuenta se diferencia porque sí ofrece rentabilidad, eso sí, la única operación que suele permitir es la de ingresos desde otra cuenta, sea o no del banco o del mismo titular. Por tanto es una cuenta para eso, para ahorrar y como hoy en día todas ellas pueden operarse on line, la cartilla física ha sido sustituida por el ordenador, la tablet o el móvil, desde donde podrás transferir dinero o dar órdenes periódicas de traspaso.
La remuneración se calcula en base al TIN, que es el Interés Nominal que nos ofrece el banco y suele pagarse por meses, trimestres o años, siendo la más habitual la primera opción. No debemos confundirlo con la TAE, que coincidirá (si no hay ningún gasto o comisión) con el interés anual, que equivale al de períodos diferentes al año. Esta Tasa Anual se obtiene por capitalización compuesta (se considera que se acumulan los intereses).
Esperamos que esta entrada haya aclarado algunas de las diferencias entre estas dos primas hermanas, la Cuenta Corriente y la Cuenta de Ahorro, que son productos similares y en ocasiones esto da lugar a confusiones. Recuerda que estamos a tu disposición para cualquier consulta y gracias por elegirnos.