La consultora Deloitte ha presentado esta semana un informe que viene a poner de manifiesto que todavía nos encontramos de lleno en la crisis del sector de la construcción que llevamos padeciendo durante los últimos tres años, pero que ya se comienza a atisbar el fin de la misma.
Concretamente, Deloitte ha puesto a la cabeza a nueve provincias españolas como las mejor colocadas para iniciar esta recuperación, a juzgar por los datos que ha ido recopilando la consultora para la realización del informe, y en función de la coyuntura macroeconómica actual. Estas provincias que se encuentran en el comienzo de la recuperación de su crisis inmobiliaria, son: Álava, Asturias, Cantabria, La Coruña, Madrid, Navarra, Pontevedra, Segovia y Vizcaya.
Después de la recuperación de estas 9 provincias, llegará una segunda fase con la recuperación de otras 23 provincias, entre las que están Málaga, Valencia o Zaragoza, entre otras, que aunque no disfrutan de las condiciones tan favorables que las nueve primeras, sí que ofrecen condiciones de normalización de la oferta y la demanda de compra-venta de viviendas.
Y, por último, quedarían otras 18 provincias, que necesitarían de más tiempo para poder absorber el stock de viviendas construidas, pero no vendidas, y comenzar a dinamizar el mercado inmobiliario. Entre estas provincias se encuentran Alicante, Ávila, Las Palmas o Santa Cruz de Tenerife.
En este mismo informe de Deloitte, se concluye que las provincias españolas en las que se necesita un mayor esfuerzo en términos de ingresos familiares para poder acceder a la vivienda en propiedad (por encima del 40%) son Barcelona Guipúzcoa y Salamanca. La media nacional, aún por encima de lo que se estima adecuado, se encuentra situada en el 38,6%.
Este porcentaje llama la atención, habida cuenta de la moderación de los tipos de interés que hemos estado viviendo hasta mediados del mes de marzo, y el descenso generalizado del precio de la vivienda. Debido al elevado esfuerzo que todavía tienen que hacer las familias para poder afrontar la compra de una vivienda, Deloitte concluye que el precio de éstas debe de seguir bajando en el corto-medio plazo.