Caja Navarra lanzó el pasado jueves un nuevo producto de inversión, el Depósito Fórmula 2, en el que el total de la imposición se invierte en dos tipos de depósitos a distintos plazos, uno con rentabilidad fija y el otro referenciada a una cesta de valores:
-
El 60% se destina a una imposición a 2 meses con una rentabilidad de un 5% de Interés Nominal Anual y un 5,15% TAE, con cobro de intereses por anticipado en el momento de la contratación.
-
El 40% restante se invierte en un depósito a 36 meses con un rendimiento referenciado a la evolución de una cesta de cuatro valores: Telefónica, Santander, Repsol e Iberdrola, pudiendo obtener hasta un 18% de interés en el conjunto de los tres años de vigencia de esta parte de la imposición, de tal modo que, en cada observación anual, si los valores de las cuatro acciones son iguales o superiores al valor inicial, obtendríamos una rentabilidad de un 6% TIN para ese periodo; en caso de que dicha condición no se cumpliese en ninguna de las fechas de observación, no obtendríamos rendimiento alguno para este porcentaje de la inversión inicial.
Este producto tiene una emisión de 50 millones de euros y la inversión mínima para llevar a cabo su suscripción será de 3.000 euros.
No cabe duda de que la parte de la imposición a tipo fijo obtendría un excelente rendimiento, aunque, eso sí, por un muy corto periodo de tiempo; no obstante, con el depósito a interés referenciado, correríamos el riesgo de no obtener rentabilidad alguna ya que, teniendo en cuenta que durante el último año prácticamente ninguna de las cuatro empresas cerró por encima del valor del día anterior, no parece muy probable que esta tendencia vaya a cambiar o, de hacerlo, que fuese precisamente con respecto a los días de observación.
Al menos en 2009 y 2010 es difícil que ocurra, si bien en 2011 podríamos ver una recuperación de la bolsa española obteniendo un 6% para el último año lo que daría aproximadamente un 2% TAE para el depósito a 36 meses.