¿Cómo descubrir una burbuja financiera?

 

¡Ya están llegando!... Progresivamente desde hace unos meses a los mercados de valores de la zona euro nuevos aires de recuperación económico-financiera y esto se suele traducir en un claro aumento del consumo, mayor nivel de renta o negocio y previsiones acertadas de amplios beneficios para las empresas cotizadas en Bolsa, lo que al final determinará subidas futuras en los precios de sus principales valores.

Cuando los seres humanos (ahorradores e inversores) nos vemos en situaciones agradables, optimistas y relajadas a nivel financiero es cuando solemos olvidar los graves problemas económicos pasados, los difíciles años de duros recortes y bolsas en caída casi vertical, con muy fuertes correcciones en las cotizaciones de la mayoría de los títulos.

Para que los futuros pequeños y medianos inversores no piensen caer en la angélica tentación de creer que, los mercados de renta variable seguirán subiendo “sine die” será muy conveniente a título formativo y didáctico recordarles el origen de la anterior burbuja financiera que “explotó” en el año 2007, y cuáles fueron sus principales errores cometidos. Veamos algunos de estos tres factores negativos que la desarrollaron:

  • El dinero barato y el ladrillo: Este coctel fue realmente nefasto dado que los Bancos Centrales (BCE, FED) tras los atentados de Nueva York en 2001 crearon un abaratamiento del precio del dinero para préstamos y este hecho, en países como España fue destinado principalmente a la inversión inmobiliaria (alta especulación), como forma particular de obtener mayores retornos dinerarios. Ante la bonanza económica inicial de este tipo de medidas financieras, los gobiernos no supieron frenar el gasto público y se dedicaron a potenciar fuertes inversiones en infraestructuras por doquier (algunas en actual desuso) y otras ayudas varias o subvenciones que al final determinaron un déficit público excesivo.
  • Autoconfianza de la Administración y Prima de riesgo: Tras negarse las evidencias de endeudamiento excesivo por parte de las autoridades financieras y continuar con el gasto público y privado se llega a un punto de no retorno, donde los mercados empiezan a desconfiar de las cuentas públicas y se elevó de manera muy rápida la prima de riesgo llegando a superarse los 600 pb, lo que situó la rentabilidad de bono español a 10 años en niveles del 7%, y con ello, la prolongada y dura financiación de la Deuda hispana.
  • Reaccionar tarde a los problemas financieros: Tras la debacle económico-financiera del país los gobiernos de turno echaron la culpa a elementos tan variados o evasivos como puedan ser: “Agresiva especulación del capital internacional”… “fondos buitres”… “Conspiraciones geo-estratégicas”…etc. Más otras razones a cual más ilusa, ante las lógicas respuestas de los mercados financieros de capitales e inversión tan globalizados.

COMENTARIOS Y CONSEJOS

La moraleja que deben entender o asimilar nuestros lectores y seguidores de esta sección Consejos de Bolsa, con vista a futuro consiste en aprender que tras el próximo “pinchazo de la burbuja financiera”, los poderes económicos, los gobiernos y algunos poderosos elementos mediáticos de prensa, televisión o Internet tenderán a quitar hierro y despejar balones utilizando frases como: “Normal o puntual desaceleración económica”… “Fortaleza del sistema financiero”… “Control total de las riendas económicas nacionales”…

La experiencia en el mundo de las finanzas en general y de la inversión bursátil en particular, nos indica que al final, todos los excesivos riesgos asumidos ya sean por los particulares como por las Administraciones Públicas serán debidamente castigados por los mercados financieros.

Por lo tanto, desde hoy ya no tendremos excusa por no haber leído nunca u oído hablar de algo que un día puede llegar a ser tan importante para nuestros bolsillos, como será saber: ¿Cómo descubrir una burbuja financiera?

Artículos relacionados:

La frase elegida para este artículo dice así:

La experiencia demuestra que los hombres y las palabras son incapaces de gobernar los acontecimientos.

Nicolás II de Rusia

Deja una Respuesta