Los mercados financieros ofertan diariamente muy diversos productos orientados a todo tipo de ahorradores o pequeños y medianos inversores, por lo que de forma periódica van apareciendo para miles de potenciales clientes, una gran variedad de opciones distintas para aquellos que buscan rentabilizar su dinero de manera más adecuada en la renta variable asumiendo con ello, un riesgo controlado y adaptado a su propio perfil inversor.
Dentro de nuestra habitual intención de mejorar la formación de los inversores menos avezados en estos temas, en esta sección sobre Consejos de Bolsa hoy realizaremos una comparativa para ver sus características o diferencias esenciales, antes de proceder a realizar la apuesta inversora, entre dos de los más habituales y usados por los inversores en los mercados y que a veces se llegan a confundir, nos estamos refiriendo a los llamados ETF,s y los Fondos de Inversión. Una vez conocida esta comparativa entre ambos productos financieros dependerá de cada inversor la estudiada y responsable decisión para elegir acertadamente el que mejor se adapte a su particular estrategia o plan de inversión.
¿Qué son los ETF,s?: Son fondos cotizados que se pueden comprar o vender como si fuesen acciones ordinarias, su función principal es la réplica de algún índice de referencia como pueden ser el IBEX35, DOW JONES, SP500…etc. Entre sus características básicas destacan las siguientes:
- Su cotización se puede seguir en tiempo real.
- El horario de negociación es el habitual de la Bolsa de Madrid (9:00 a 17:35h).
- Menores comisiones que los habituales Fondos de Inversión debido a su gestión pasiva.
- No tienen comisiones de reembolso ni suscripción, solo tienen la lógica comisión de mantenimiento por lo que se asemejan mucho a la compra-venta de las acciones ordinarias.
- Su fiscalidad es como el de las acciones y no se puede obtener ventajas en los traspasos entre ETF,s, al contrario que los Fondos de Inversión, donde solo se tributa al vender las participaciones.
¿Qué son los Fondos de Inversión?: Este producto es más conocido en el tiempo por los inversores y consiste en la agrupación de capital entre varios o muchos partícipes para que este dinero una vez invertido sea gestionado por profesionales del sector que, a su vez cobrarán su trabajo mediante comisiones cargadas a dicho fondo acumulado. Veamos algunas de sus características principales:
- Existen en la actualidad muchos tipos de Fondos de Inversión que van desde los de renta fija, mixta o variable, sectoriales, globalizados, emergentes, inmobiliarios…etc.
- Su gestión es activa según criterios decididos por los gestores del fondo de acuerdo al estilo y tipo de inversión, su volatilidad, diversificación, porcentaje de renta variable y entre otros, vocación de corto, medio o largo plazo inversor.
- El precio de liquidación del fondo es público y conocido a diario referido a la sesión bursátil del día anterior.
- Pueden tener comisiones de suscripción y reembolso y en algunos casos con porcentajes elevados 3% o 5%, para evitar la “excesiva” entrada y salida de capital diario y así mismo, algunos fondos de inversión solo pueden ser contratados a partir de aportaciones mínimas de altas cantidades dinerarias -30.000, 60.000 o 100.000 euros- (esto no suele ser lo habitual).
- La compra o venta de participaciones en el fondo de inversión no es automática debiendo esperar hasta varios días (según sean nacionales o extranjeros) para que se ejecuten las operaciones.
- Tiene la ventaja fiscal de no tributar por traspaso de capital entre fondos y solo se deberá “pasar por Hacienda” una vez realizada la venta parcial o total de las participaciones en el fondo invertido.
Como podemos apreciar, los Fondos de Inversión tienen una importante ventaja fiscal ante los ETF,s, no obstante, tienen otros inconvenientes como pueden ser unas comisiones más altas que estos últimos. Además, los fondos no tienen que guardar correlación con sus índices de referencia a los que casi siempre intentarán batir en rentabilidad y según los históricos… al final… ¡Son muy pocos los que lo consiguen!
Recordemos que en este mundo de la inversión en los mercados bursátiles, nada es fácil, ni se tienen varitas mágicas que nos puedan garantizar el acierto seguro. Las decisiones de inversión deberán estar apoyadas siempre y fundamentalmente por una buena formación financiera o en su caso, un adecuado asesoramiento profesional.
Para continuar con su propia formación inversora nuestros muchos lectores y seguidores ya pueden realizar su propio estudio y mejor comparativa, antes de arriesgar su dinero, mediante este artículo que hemos titulado: “Diferencias ETF,s y Fondos de Inversión”.
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La frase elegida para este artículo dice así:
No hay nada repartido de modo más equitativo que la razón; todo el mundo está convencido de tener suficiente.
René Descartes