Se trata de una hipoteca que tiene como finalidad la subrogación y ofrece unas condiciones muy buenas. Se trata de un contrato con tipo de interés mixto, es decir, un periodo inicial de un año al 1,95% TAE y el resto de periodos a Euribor 1 año + 0,35%. Los límites que Deutsche Bank nos impone es un estirado 70% sobre el valor de la tasación y la edad mínima para su contratación reside en 18 años, mientras que la máxima a los 75 años. El plazo máximo se amplía hasta 30 años y la mínima a un sólo año.
Aún así, con esta hipoteca no nos libramos de las comisiones. Pese a no pagar una comisión por el estudio, tendremos que dejarnos un 0,60% (mínimo de 400 euros) en su apertura y un 0,50% si lo queremos amortizar o cancelar anticipadamente. No hay posibilidad de modificar condiciones.
No obstante, como casi siempre ocurre con esta ganga de productos, la entidad financiera nos obliga a contratar muchos productos adyacentes. En este caso tendremos que contratar seguros de hogar, de vida y de crédito hipotecario, tendremos que domiciliar nómina y recibos, tener una tarjeta de crédito con un gasto mínimo de 3.000 € anuales y una de débito, así como un plan de pensiones y una cuenta corriente.
Otro de los puntos negativos del producto es que el banco no nos ofrece ninguna posibilidad de aplazar cuotas o tener periodos de carencia.
Las revisiones de hipoteca tendrán una periodicidad anual y por cada condición que no cumplamos, se nos aumentará un 0,20% el diferencial del interés variable hasta un máximo de Euribor + 0,75%.