Hoy analizamos la Hipoteca Naranja SAREB (Segunda Vivienda) de ING, es decir, un préstamo hipotecario para la vivienda que no sea habitual y siempre que compremos el inmueble por medio del Sareb. ING no ofrece servicios inmobiliarios, pero sí la financiación, de manera que lo que la entidad propone es conseguir una vivienda con una serie de ventajas para el comprador, siempre que se cumplan esos requisitos.

La Hipoteca Naranja SAREB (Segunda Vivienda) de ING

Debemos tener en cuenta que es para la segunda vivienda, es decir, no sirve para comprar aquella en la que vivimos normalmente. Por otro lado esto conlleva algunas limitaciones, como que el porcentaje a financiar es menor y el diferencial (lo que el banco añade al interés de referencia), es algo mayor.

Por otro lado, la Hipoteca Naranja SAREB (Segunda Vivienda) de ING  financia viviendas incluidas en las que se transfirieron al Sareb, para eso,  ING te ofrecería un listado con las que están disponibles y sus precios, de manera que puedas elegir la que más se adapte a tus gustos.

La cuenta asociada es imprescindible

Para contratar la hipoteca hay que ser cliente, es decir, tener abierta una Cuenta Nómina o Sin Nómina o también haber contratado un producto de inversión o de ahorro en los últimos 3 meses, de manera que una vez hecho esto, ellos puedan hacerte el estudio de la hipoteca.

No te preocupes si por algún motivo no te la concedieran, puedes darte de baja sin problemas, aunque si lo haces, dejarás de percibir los beneficios de una cuenta on line muy interesante. Recuerda que puedes acceder a la información legal y técnica de este producto siguiendo este enlace.

Opinión del experto

Nos encontramos ante un préstamo hipotecario, en este caso dirigido a la adquisición de la segunda vivienda, lo que conlleva un porcentaje de financiación algo más bajo y un diferencial un poco más alto. Esto tiene su lógica, ya que si tenemos hipotecada otra vivienda, nuestra renta disponible es menor.

Las hipotecas, de las que hemos hablado aquí, se amortizan por el llamado “método francés” o de mensualidades constantes, pero esto no debe llevarnos a confusión, la mayoría, como esta, están referenciadas con un índice como el EURIBOR, que se suele revisar trimestralmente. Pero durante el período correspondiente, la mensualidad va a permanecer constante y de ahí el nombre de método de mensualidades constantes.