Cuando los futuros pequeños y medianos inversores se planteen seriamente la gestión de sus ahorros o capital destinado hacia la inversión, con el loable fin de poder rentabilizarlo adecuadamente obteniendo beneficios y así lograr una aceptable calidad de vida personal o familiar será preciso que de manera previa conozcan, entiendan y asimilen, diversos conceptos financieros básicos que le faciliten dichos objetivos dinerarios.
Dentro de las diferentes premisas técnicas, factores internos o diversidad en los productos financieros disponibles para cualquier cliente inversor, siempre se deberán hacer las cosas bien desde el principio para lograr el éxito inversor. Veamos algunos de estos preceptos, factores y consejos antes de participar con dinero real en el mercado bursátil:
- Reconocimiento de su propio objetivo vital y financiero: Para empezar con buen pie en este complejo mundo de la inversión deberá plantearse algunas cuestiones personales y financieras como puedan ser… ¿La inversión es para obtener capital para un negocio?… ¿Utilizar las posibles ganancias para pagar futuros gastos universitarios de los hijos?… ¿Viajes, bienes inmuebles?… ¿Adquirir un buen nivel de calidad de vida en la jubilación?…
- Verificar y asumir la realidad financiera actual: Todos los futuros inversores partirán de situaciones financieras personales distintas por lo que se deberá verificar de manera previa el nivel de ingresos recurrentes y previstos, gastos fijos, deudas, préstamos, créditos…etc. Solo la realidad dineraria actual puede permitir realizar una buena planificación y diseño de las estrategias más adecuadas para cada perfil como inversor.
- Consultar, comparar y obtener asesoramiento profesional: Acabando con la timidez histórica arrastrada desde hace tiempo en España de realizar comparativas y buscar asesoramiento, con profesionales del sector financiero antes de invertir. Éste profesional legalmente autorizado les realizará estudios, entrevistas y adecuación de los mejores activos financieros que mejor se adapten a sus peculiares necesidades dinerarias u objetivos vitales de futuro.
EL FACTOR TIEMPO Y LA DECISIÓN DE INVERTIR
El tiempo siempre es un factor esencial a la hora de participar en los mercados de renta variable y alcanzar altas rentas o beneficios, esto no significa que… “A mayor tiempo con la inversión, le tenga que acompañar inexorablemente una mayor rentabilidad”… Invertir a largo plazo es un consejo prioritario cuando se desea obtener beneficios huyendo de la inversión altamente especulativa del Trading diario y especialmente indicada, para aquellos inversores más conservadores que no quieren ni pueden estar todos los días frente a la pantalla del ordenador “sufriendo o dudando”, según fluctúen las cotizaciones y niveles de cada acción cotizada en Bolsa o índice bursátil de referencia. Los periodos temporales más extensos les liberarán del estrés y amortiguarán los periodos de tendencias más bajistas con otros alcistas, lo que al final pasado unos años repercutirá en unas medias de rentabilidad muy aceptables para cada inversor.
Una vez realizados todos los pasos anteriores aquí descritos, por parte de los futuros inversores noveles y con las estrategias o planificaciones debidamente definidas con el asesoramiento profesional es cuándo llegará el momento de tomar las decisiones oportunas y las órdenes de ejecución de operativas inversoras.
Adoptar una postura semi-profesional y asumir que la psicología inversora nos aconseja realizar el seguimiento de las inversiones con una visión de medio-largo plazo atenuando las emociones, tanto excesivamente positivas como exageradamente negativas será el principio de un buen camino de éxito, que te lleve al final deseado mediante una: “Hoja de ruta para tus buenas finanzas”.
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La frase elegida para este artículo nos la recuerda un joven seguidor de esta sección, Pablo Quilez, desde Valencia y dice así:
Para el hombre laborioso, el tiempo es elástico y da para todo. Sólo falta el tiempo a quien no sabe aprovecharlo.
Gaspar Melchor de Jovellanos