Cuando el inversor se plantea participar en los mercados bursátiles, vía acciones o fondos de inversión, siempre piensa en las posibles ganancias futuras que le puede deparar su apuesta financiera, pero además, debe ser muy consciente de que toda inversión en renta variable por su origen y características es de resultado final incierto, debido a los muchos condicionantes que confluyen en los mercados.
Para poder operar de forma correcta, responsable y acertada en Bolsa mediante la compra de acciones o invertir en uno de los muchos fondos de inversión existentes en los mercados, con la adquisición de sus participaciones, el pequeño y mediano inversor siguiendo con su formación técnica y psicológica desde este sección de Consejos de Bolsa, deberá tener muy presente un factor principal antes de tomar la decisión de inversión. Este factor tan temido como imprescindible para todo tipo de aventura financiera en la loable y lógica búsqueda de poder ganar dinero en los mercados, se denomina: RIESGO.
Existen muy diversos tipos de riesgo a asumir dependiendo del tipo de producto de inversión elegido, por lo que vamos a ver algunos de los más destacados y sus características básicas:
- El riesgo de liquidez: Cuando hablamos de inversión en fondos se refiere a la capacidad de adaptación del mismo ante posibles rotaciones necesarias de sus posiciones.
- Riesgo por tipos de interés: Los precios de los activos se pueden ver alterados por las fluctuaciones de los tipos de interés. En la euro zona lo determina el Banco Central Europeo –BCE- En renta variable suele ser mejor las bajadas de tipos que las subidas, dado que se pone más dinero disponible en los parqués bursátiles por parte de los inversores.
- Riesgo por el tipo de cambio: Cuando una inversión se realiza en activos sometidos a una referencia de divisa establecida, sus fluctuaciones, afectarán al resultado final de dicha inversión financiera.
- Riesgo geográfico-político: La inversión concentrada en un determinado país o zona geográfica limitará su resultado financiero según la evolución de su economía, la política local, la gestión gubernamental y los cambios de legislación que la puedan afectar a las empresas que formen dichas carteras en los fondos de inversión o a las acciones de las empresas cotizadas.
- Riesgo en productos financieros derivados: Este tipo de inversión más especulativa para la consecución de mayores rentabilidades, exige a su vez, un mayor riesgo motivado por el gran apalancamiento que les suele acompañar y las variaciones del precio en el subyacente, puede generar una multiplicación de las pérdidas en el valor de las carteras.
CONSEJOS ANTE LOS RIESGOS DE INVERSIÓN
Como bien sabemos desde hace mucho tiempo, no existe la inversión financiera perfecta sin riesgo de padecer pérdidas de patrimonio, porque solo una buena selección de los activos, un estudiado conocimiento de sus ventajas e inconvenientes y un eficaz asesoramiento profesional nos puede llevar al éxito inversor. Para todo ello, podemos acceder actualmente a los informes periódicos que publican las gestoras de fondos o las empresas cotizadas en Bolsa e incluso, verificar la situación financiero-empresarial de las emisiones privadas de activos renta fija, con el fin de ver la capacidad de éstas para poder hacer cumplir sus compromisos de pago.
En toda inversión en los mercados se debe considerar la situación empresarial particular, la de su sector industrial o financiero y la general de la economía nacional, sin olvidar, las incontrolables circunstancias políticas y económicas de la zona geográfica elegida y para finalizar, tener muy claro que esto es renta variable y como su nombre indica, serán muchos los factores que determinarán si esa condición variable… ¡¡ Finaliza dinerariamente a nuestro favor !!
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La frase elegida para este artículo dice así: Honestamente, no veo mercados. Solo veo riesgos, rentabilidades y dinero, Larry Hite.