Cuando hablamos de inversores conservadores siempre nos referimos lógicamente a aquellos que desean ante todo proteger su capital aún a riesgo, de perder la opción de obtener una mayor rentabilidad por su apuesta inversora. La idea básica de este tipo de personas es evitar el riesgo financiero de los mercados, la alta volatilidad y ante todo, los fuertes vaivenes y cambios de tendencia que influyen de forma periódica o repentina en los mercados de renta variable.
Como ejemplo de inversión conservadora podríamos pensar en los fondos de inversión de renta fija, fondos monetarios e incluso, los fondos de renta mixta siempre que la relación entre renta fija y variable de sus activos no supere el 80/20 respectivamente. Dentro de la inversión a largo plazo que suele ser la más aconsejable especialmente para los pequeños y medianos inversores, hoy vamos a aprender o recordar en esta sección de Consejos de Bolsa, un sistema de estrategia inversora no muy ortodoxo, pero que a la larga suele representar buenos beneficios según se puede apreciar en las series históricas de los índices más representativos de nuestros mercados de Bolsa.
ESTRATEGIA DE COMPRA PERIÓDICA (LARGO PLAZO)
Esta estrategia de inversión es muy simple, consiste en proceder a invertir en un índice muy conocido y representativo como pueda ser en España el índice IBEX35 de la Bolsa de Madrid que además, engloba las principales empresas del país lo que es síntoma y “termómetro” de la economía real y de las esperanzas de beneficios futuros, que quedarán reflejadas mediante las subidas o bajadas en las cotizaciones de los precios de sus acciones. La idea de inversión es recoger el total de las empresas utilizando su índice, para compensar las pérdidas de unas con las subidas de las demás, en una acción especulativa que se basa en la creencia y apuesta bursátil de que en el largo plazo el índice IBEX35 subirá de forma importante por las mejoras futuras de la economía nacional y global.
Para no caer en el error de entrar en el mercado de valores cuándo los precios estén más altos, tener el riesgo de entrar rápidamente en pérdidas y dando por hecho, que muchos nuevos inversores pueden desconocer cuándo “el mercado es caro o barato”, se deberá proceder a invertir de forma periódica la misma cantidad de dinero, es igual si este tipo de inversión se realiza cada mes, trimestre o semestre. Con este tipo de estrategia se minimiza la apuesta puntual afectada por situaciones de mayor o menor euforia inversora o por el contrario, la retracción de las aportaciones en momentos de incertidumbre o fuertes descensos en los índices.
CONSEJOS PARA REALIZAR LA ESTRATEGIA DE LARGO PLAZO
Usted puede desconocer cómo funciona la Bolsa, simplemente tiene un dinero que normalmente “le sobra de forma periódica” una vez satisfechas sus necesidades económicas familiares o bien, se ha planteado tener el día de mañana un dinero disponible para una mejor jubilación, viajes o actividades de ocio. Pues, este sistema de estrategia inversora puede ser adecuado para sus intereses de futuro y veremos por ello, dos argumentos a favor de plantearse la apuesta bursátil:
- Con las aportaciones (compras) periódicas de largo plazo se elimina la cuestión psicológica del miedo inversor durante mucho tiempo y se relativiza, la tensión emocional que muchas veces nos puede hacer cometer errores de inversión influenciados por situaciones complejas de los mercados de valores.
- Una vez realizadas las primeras compras en el índice elegido y pasados unos meses o pocos años se puede dar el caso de haber cogido (de forma aleatoria o accidental) una larga tendencia alcista desde su zona más baja, por lo que rápidamente el índice subirá y veremos surgir buenas plusvalías que podrán ser aprovechadas en cualquier momento y convertidas en dinero para nuestros bolsillos.
ADVERTENCIA INVERSORA: Como todo en la Bolsa, nunca se sabe que van a hacer los mercados dentro de unos años, meses, semanas e incluso días, por tanto, la apuesta siguiendo la estrategia de largo plazo se debe realizar de manera responsable, constante, disciplinada y especialmente, estudiada y planificada dentro de cada plan personal de inversión eligiendo de forma calculada el momento de ejecutar la venta del producto financiero.
Sabiendo en qué terreno financiero nos movemos se evitan las sorpresas desagradables y teniendo claro cómo queremos plantear nuestro futuro económico familiar siempre será posible optar entre otras por: “La estrategia conservadora a largo plazo”.
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La frase elegida para este artículo dice así:
El futuro es ese periodo de tiempo en el que prosperan nuestros negocios, nuestros amigos son verdaderos y nuestra felicidad segura.
Ambroise Bierce –Escritor-