Una vez conseguida la loable, constante y compleja tarea de acumular un pequeño capital en forma de ahorros y sabiendo que parte de ese dinero a los potenciales futuros pequeños y medianos inversores no les puede hacer falta para un periodo aproximado de 3, 4 o 5 años (salvo graves imprevistos) será quizá el momento adecuado para plantearse la obtención de mayores rentabilidades a través de la inversión en renta variable.
En diferentes artículos de esta sección Consejos de Bolsa hemos reiterado siempre en un lenguaje lo más coloquial posible para nuestros lectores la importancia de realizar la apuesta inversora aprovechando los niveles de precios más convenientes y siempre acompañados de una correcta planificación y estrategia personal adaptada a cada perfil inversor.
En este mundo de la inversión bursátil nunca será fácil acertar con los precios o cotizaciones más bajos a partir de los que el mercado, se supone, volverá a su pasada senda alcista (ciclos y tendencias bursátiles). Pero supongamos que nuestro futuro inversor novel se plantea y desea seriamente destinar parte de su capital ahorrado a la inversión financiera de la manera siguiente:
- Un 60% en acciones.
- Un 40% en bonos.
No deja de ser un reparto o distribución aleatoria, como pueda ser cualquier otra, en función del mayor o menor riesgo que se pueda seleccionar personalmente según el porcentaje de renta variable elegido.
Ante este tipo de inversión financiera, unas de las preguntas o dudas más comunes que suelen plantearse los inversores menos avezados pueden ser las siguientes: ¿Cuándo estarán los precios más baratos para invertir?… ¿Será suficiente con que el mercado baje un 25%?… ¿Lo debo invertir todo de golpe o de manera periódica?
Como siempre de manera didáctica y formativa vamos a contestar a estas cuestiones existenciales para aquellos que se aproximan a los parqués por primera vez, a la búsqueda de altas rentabilidades y superiores ganancias dinerarias de las que en la actualidad les pueden ofrecer la renta fija o los depósitos a plazo.
RESPUESTAS Y CONSEJOS DE INVERSIÓN
- ¿Cuándo estarán los precios más baratos para invertir?: Nadie puede saber exactamente hasta donde caerán los precios en las acciones cotizadas en Bolsa. Partiendo de esa base primordial son diversos los métodos para intentar localizar y aprovechar los niveles de soportes anteriores y utilizar para sus análisis los indicadores técnicos que les puedan ayudar a entrar en el mercado con una base más sólida y de menor riesgo financiero.
- ¿Será suficiente con que el mercado baje un 25%?: Decía el gran experto bursátil John Maynard Keynes que: “El mercado puede permanecer irracional más tiempo del que usted puede permanecer solvente”. Su traducción para el nuevo inversor es muy clara y verifica que un mercado que haya corregido un 25% puede volver a perder otro 20%, 25%, 30%, e incluso más.
- ¿Lo debo invertir todo de golpe o de manera periódica?: La respuesta dependerá de si su inversión está planificada para el medio-largo plazo (muy aconsejable para inversores noveles). Si es así, nada le garantizará que invirtiendo de forma periódica durante los próximos meses le pueda reportar mejores rentabilidades finales, que si aprovecha por ejemplo la actual corrección de la Bolsa y realiza su inversión ahora por el total del capital a invertir.
Nuestro consejo financiero esencial es que usted construya su propia combinación entre productos de renta fija (bonos, pagarés, letras) y renta variable (fondos de inversión, acciones) según su propia capacidad para asumir riesgos dinerarios y destinada para un periodo temporal que le permita tolerar y asumir los lógicos vaivenes bursátiles y las habituales fases de alta volatilidad en los mercados de valores.
Simplemente haciendo las cosas de forma estudiada, calculada, sin prisas y responsablemente, usted tendrá muchas opciones reales de terminar ganando dinero con sus finanzas personales y así, algún día, podrá decir con todo orgullo y satisfacción: “Yo supe invertir con cabeza mi dinero”.
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La frase elegida para este artículo dice así:
Con orden y tiempo se encuentra el secreto de hacerlo todo, y de hacerlo bien.
Pitágoras