Queridos lectores, desde hace muchos años los mercados se han acostumbrado a manejar la palabra “locomotora” como símbolo del país que afortunadamente en esa época ejercía de arrastre económico para los demás, ayudando a generar riqueza y sirviendo de estímulo para el crecimiento financiero internacional.
Durante bastante tiempo se habló de la “locomotora americana” y posteriormente la “locomotora alemana”, esta última salió al relevo de la anterior cuando estalló la crisis de las hipotecas subprime y el escándalo de Lehman Brothers, por ello para nuestros “pequeños y medianos inversores” hoy veamos que ocurre cuando la locomotora alemana pierde vapor.
La palabra más usada estos días en los mercados es la tan temida recesión. El problema que los analistas observan es la falta de contundencia por parte de los líderes políticos en las medidas económicas a adoptar por parte de Europa y EE.UU.
Con motivo de la crisis de las deudas soberanas de los países periféricos y el aumento del techo de gasto en USA. Se ha creado un caldo de cultivo para la especulación “salvaje” y la generación de enorme desconfianza respecto a los beneficios futuros de las empresas para el segundo semestre de este año 2011 y para todo el 2012.
Los decepcionantes datos macroeconómicos hacen que se revisen a la baja las previsiones de crecimiento, donde los ajustes fiscales anunciados más la fuerte rebaja en la inversión pública de los estados con mayor deuda presagian unos meses complicados en las bolsas de valores, que al final, son los espejos -siempre excesivos- de la “temperatura” dineraria actual y el prolongado triste ánimo del inversor.
La “locomotora alemana pierde vapor”. Lejos de servir de impulso para el resto de los países de la zona euro, se está convirtiendo en una especie de problema para la salida de la crisis, afectando a los estados que actualmente se encuentran parados en distintas “vías muertas”, –valga el símil- como “vagones” de distintos tamaños a la espera de ser enganchados por la máquina del tren económico europeo.
La reunión entre Sarkozy (Francia) y Angela Merkel (Alemania) ha dado como resultado la victoria ideológica de la “dama de hierro alemana” llegándose entre otros a los acuerdos siguientes:
- Desechar la idea de emitir eurobonos o eurotítulos avalados por las economías más sólidas del área del Euro.
- No ampliar el Fondo Europeo pro Estabilidad Financiera (FEEF), que es el utilizado para comprar deuda de países en apuros económicos.
- Imposición de una rígida disciplina fiscal y monetaria en los países afectados o con posibilidad de contagio de la “fiebre” de la deuda soberana.
- La creación de un Gobierno Económico Europeo que unifique criterios y supervise las finanzas de los estados miembros (esta última decisión al parecer es concesión de la canciller a su homólogo francés). Fuente: www.europapress.es
COMENTARIOS Y CONSEJOS:
La actual situación de los mercados bursátiles y de deuda han obligado al ejecutivo español a disponer otra batería de nuevas medidas anticrisis que serán aprobadas el 19/08/2011 en el Consejo de Ministros y de las que el Presidente del Gobierno dará las correspondientes explicaciones en el Congreso de los Diputados el día 23/08/2011.
La situación crítica de las economías europeas se prolonga de forma excesiva en el tiempo, obligando a los gobiernos a legislar recortes de gastos y aumentos de impuestos e ingresos, con el fin de recuperar credibilidad en los mercados, atajar la “sangría” de pérdidas de capitalización de las empresas cotizadas con la consiguiente disminución de capital patrimonial de los inversores.
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La “locomotora alemana” no termina de enganchar los vagones de sus socios europeos, por lo que estos, echan en falta la solidaridad mostrada en años de bonanza cuando la gran industria exportadora alemana se sirvió de ampliaciones de países en la zona euro, a fin de abarcar un gran mercado que le ha servido para seguir liderando este lado económico del Atlántico. (Ver artículos “Los enemigos de Angela Merkel” y “En qué consiste la prima de riesgo”).
La frase elegida para este artículo dice así: “Presta dinero a tu enemigo y lo ganarás a él; préstalo a tu amigo y lo perderás”, Benjamin Franklin.
Nosotros en Consejos de Bolsa, seguiremos atentos a la evolución de los mercados para lectores como usted. Esto será otro día.