Entre las distintas opciones de como rentabilizar el ahorro o el capital, hoy vamos a fijar nuestra mirada en la renta fija como inversión.
Para ello debemos conocer que es la renta fija, que no es otra cosa que un “préstamo” que realizan los inversores a empresas particulares o entidades públicas, a cambio de unos pagos periódicos y amortizaciones previamente acordadas.
La variación en los tipos de interés -por los bancos centrales- y el riesgo crediticio de las empresas (rating) -por parte de las agencias de calificación-, pueden ocasionar fluctuaciones en los precios de las obligaciones, por lo que la definición de “fija” se refiere a la renta pero no al precio que es cambiante, pero menos que las acciones.
Veamos las inversiones más comunes que podemos hacer en renta fija:
DEFINICIONES:
- BONOS: Son títulos de renta fija, emitidos por una entidad pública o privada. Normalmente se emite al portador y se pueden negociar en bolsa. Los bonos implican la promesa de realizar unos pagos periódicos de una cantidad de dinero en unos plazos determinados en el momento de la emisión, teniendo a su vez un plazo de vencimiento, al final del cual el emisor tiene la obligación de devolver el capital prestado por el inversor.
Existen distintos tipos de bonos como son: Bono a la par, Bonos con prima, Bono al descuento, Bonos basura(alta rentabilidad y alto riesgo), Bono del Tesoro (Deuda Pública, con plazo de 2 a 5 años, los emite el Tesoro Público y se negocian en el mercado secundario de renta fija).
- PAGARÉ: Es un documento privado por el que el emisor se compromete a abonar cierta cantidad estipulada en un plazo determinado. Los pagarés más habituales son los bancarios, los de empresa y los del Tesoro Público (son a corto plazo y a un interés fijo).
- LETRAS DEL TESORO: Son títulos de renta fija emitidos por el Tesoro Público y sus plazos de vencimiento son de tres meses, seis meses, un año y dieciocho meses (Deuda Pública a corto plazo). Las letras del tesoro se adquieren por subasta en el mercado primario y se negocian en el mercado secundario de renta fija.
- OBLIGACIONES: También son títulos de renta fija donde el tipo de interés es fijo y los pagos están determinados (semestral o anualmente). Se diferencian de los bonos principalmente en que el plazo de amortización es más largo superior a los tres años.
Existen varios tipos de Obligaciones como son: Obligaciones garantizadas, (llevan una garantía adicional del emisor, como avales o hipotecas) Obligaciones convertibles (en acciones), Obligaciones bonificadas (parte de los intereses se desgravan del IRPF), Obligaciones participativas (participaciones preferentes), Obligaciones del Estado (plazo de amortización superior a cinco años).
COMENTARIOS:
Para nuestros “pequeños o medianos inversores” y lectores en general, vamos comentar y explicar en un lenguaje coloquial la diferencia, (para muchos no tan evidente), entre obligaciones, bonos y acciones.
Cuando se invierte en obligaciones o bonos se convierte el poseedor del título en acreedor de esa empresa o entidad y se tiene derecho a la devolución de la deuda con sus intereses en el plazo acordado, por lo que se llama inversión en renta fija.
A diferencia de los bonos y obligaciones donde se adquiere parte de la deuda de las empresas, las acciones convierten a su comprador en “dueño” (entre otros muchos) de la empresa, por lo que el futuro de esta última inversión está ligada a la evolución de la misma (renta variable), sus beneficios o perdidas, el reparto -si procede- de los dividendos, todo ello afectará a la evolución de la cotización de los títulos en el caso de pertenecer a un mercado bursátil. (Ver operar en bolsa con «http://cban.co/clicktrade«, la plataforma más económica y eficaz con magníficas herramientas y periodo de prueba gratuito).
Las inversiones pueden ser en depósitos, letras, pagarés, bonos, obligaciones, fondos de inversión, acciones etc. Por lo que existen en los mercados financieros una gran diversidad de productos adaptados al nivel de riesgo que cada inversor quiera asumir y el nivel de beneficios que se intente lograr, (ver artículo “Tener conocimientos de bolsa”).
Habitualmente elegimos una frase para finalizar estos artículos de Consejos de Bolsa, la de hoy dice así: «Mientras puedas, ahorra para la vejez y la necesidad, porque el sol de la mañana no dura todo el día», Benjamín Franklin.
Nosotros para su interés seguiremos comentando la actualidad económica y financiera. Esto será otro día.