Aunque es una figura que con la explosión de la burbuja inmobiliaria ha perdido parte de su popularidad, la verdad es que la reunificación de deudas es una opción que muchas familias barajaron antes y durante de la crisis, y que todavía existe en nuestro sistema financiero.
Pero, ¿qué es exactamente la reunificación de deudas?
Como su propio nombre indica, no es más que colocar todas las deudas acumuladas en una sola, de forma que se consigue reducir la cuota mensual que se paga, de forma que las familias pueden llegar de manera más holgada a fin de mes. Sin embargo, hay que comprender bien su funcionamiento antes de decidir que la reunificación de deudas es la mejor opción.
En primer lugar es necesario disponer de una vivienda en propiedad, porque lo que se hace es unificar todas las deudas dispersas en una nueva hipoteca sobre la vivienda, de forma que se amplia el plazo de devolución, reduciendo el tipo de interés que se paga.
El mayor peligro, evidentemente, es que si se dejan de pagar las cuotas hipotecarias que se han formalizado el usuario tiene el peligro de perder la vivienda, algo que antes de la reunificación de deudas no sucedería, ya que eran deudas puramente financieras.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta los gastos en los que se incurre al reunificar deudas. En primer lugar están todos los gastos asociados a la formalización de la nueva hipoteca, como son la comisión de apertura, los gastos de notaría, de registro, de tasación, etc.
A ello habrá que añadirle los gastos de cancelación de todos los préstamos que se quieran incluir en la reunificación de deudas, así como de la hipoteca original, si la hubiera. Y, por último, hay que tener también en cuenta la comisión del intermediario financiero que gestiona la reunificación.
Una vez tenidos en cuenta todos los gastos asociados a la operación, también hay que asegurarse de que la cuota resultante sea menor que la suma de las cuotas que se venían pagando hasta ese momento para justificar la rentabilidad de la operación.
Si después de toda esta reflexión previa, la reunificación de deudas aparece como una buena opción, hay que decantarse por una entidad seria, preferiblemente banco o caja, y leer y releer todas las cláusulas del contrato, para evitar sorpresas de última hora.
En definitiva, la reunifiación de deudas puede ser una buena solución en tiempos de emergencia, pero no debe de ser tomada como la gallina de los huevos de oro, porque implica ciertos riesgos y costes que deben de ser tenidos en cuenta antes de decantarse por ella.
One Response to “La Reunificación de Deudas”
Miguel
Tengo una hipoteca y 5 prestamos personales se pidió para hacer mejoras en la casa y comprar coche querría reunificacion de todos los prestamos haciendo hipoteca nueva .un saludo