Tras dos años de trabajo, Ofideute, la oficina de intermediación hipotecaria de Cataluña ha publicado sus resultados y se los ha presentado al gran público, con una significativa nota positiva que marca el hecho de haber sido capaces de detener un total de 259 desahucios en su período de existencia.
Si comparamos estas cifras con las cerca de 700 peticiones de intermediación que ha recibido, estamos hablando de un porcentaje de éxito del 37%, lo que supone una importante inyección de moral para seguir trabajando en el mismo sentido e ir en la misma dirección hacia el futuro.
Ofideute funciona como mediador entre los clientes hipotecados y sus entidades financieras, para evitar que la posición de fuerza de la que disponen las entidades financieras sea un arma para evitar que las familias hipotecadas puedan ver sus derechos respetados y tengan que ceder a cualquier pretensión del sector financiero.
En un primer lugar, para los casos más extremos en los que la falta de poder adquisitivo para hacer frente al pago de las cuotas hipotecarias va más allá de una falta de ingresos puntual, Ofideute está solicitando la implementación de la dación en pago como método resolutorio de la situación de embargo.
De esta manera, la vivienda que sirvió como garantía a la hora de formalizar el contrato hipotecario sirve ahora como pago de las cantidades restantes del préstamo hipotecario, de manera que la familia pierde su vivienda habitual, pero, a cambio queda libre de la deuda hipotecaria acumulada.
Por otro lado, para casos más livianos, Ofideute prevé situaciones más relajadas, como es la moratoria hipotecaria, tanto por la totalidad de las cuotas como por una parte de las mismas, lo que diferenciaría entre moratoria total o moratoria parcial, con lo que se consigue que el cliente pueda seguir pagando sus cuotas hipotecarias a la vez que puede llegar a final de mes de una manera más o menos desahogada.
Se trata, en definitiva, de una forma de conseguir llegar a un punto intermedio en el que ninguna de las dos partes salga perjudicada en exceso, y ambas puedan seguir adelante una vez finalizada la relación contractual entre las dos.