La inversión en los mercados de capitales lleva anexo un complicado proceso emocional no exento de dudas razonables para sus partícipes, a excepción de las personas que por su formación o experiencia hallan llegado al nivel óptimo inversor para saber por qué están invirtiendo, cuáles son sus objetivos dinerarios y ante todo, qué riesgos financieros están dispuestos a asumir para lograrlos.
En la inversión entra de pleno la actitud psicológica del individuo ante la posibilidad de ganar dinero en los mercados y su preparación emocional para saber soportar las volatilidades de precios, las mini-crisis periódicas e incluso, los fuertes movimientos especulativos que suelen realizar “las manos fuertes del mercado”, a la hora de forzar la ruptura de soportes o resistencias en los precios. Como solemos recordar en esta sección de Consejos de Bolsa especialmente dirigida para pequeños y medianos inversores, existen personas con un perfil psicológico determinado que desean que otros se encarguen de sus inversiones (gestores) para su mayor tranquilidad y por el contrario, muchos otros que aprovechando las herramientas de análisis e información disponibles en la actualidad prefieren operar en los mercados de forma directa y personal.
A la hora de participar, unos inversores serán del tipo agresivo y otros conservadores y esta clasificación la determinará la composición de sus activos financieros y sobre todo el nivel riesgo que conforman la media de sus carteras. Aquí radica la actitud psicológica de algunos nuevos inversores que en situaciones más radicales o extremas, pueden llegar a poner en riesgo la seguridad financiera de sus familias, en la irresponsable búsqueda de rentabilidades excesivamente altas, asumiendo riesgos… ¡¡También excesivos !!
PSICOLOGÍA: ERRORES DE NOVATOS ANTE LAS INVERSIONES
Entendiendo que esto de la inversión no es un juego de niños y que la gente no regala su propio dinero a otros, debemos de apreciar y valorar desde el punto de vista psicológico y financiero no caer en algunos de los más comunes errores de principiantes a la hora de operar. Veamos cuales son:
- Invertir sin formación técnica: Este se puede considerar como el mayor riesgo para el inversor, dado que es como conducir un vehículo por la autopista sin tener ningún conocimiento teórico o práctico. La posibilidad de sufrir un accidente de tráfico será solo cuestión de tiempo.
- Invertir sin estar debidamente asesorados: No basta con leerse… 25 páginas de Bolsa de distintos brókers o analistas… para saber qué inversión es la más adecuada para nosotros. Cuando los mercados se encuentran en fases alcistas prolongadas es relativamente fácil acertar con pronósticos del futuro más corto-placista, sin embargo, la calidad del asesoramiento profesional serio se demostrará en situaciones de fuertes correcciones de precios y alta volatilidad.
- Invertir en Bolsa queriendo ganar de una forma rápida: No existe ningún problema psicológico ni financiero en querer ganar cuanto más dinero posible y preferiblemente en el menor periodo temporal. El principal factor negativo de esta operativa, radica en que las inversiones excesivamente especulativas que pueden llegar a conseguir este tipo de afortunados resultados, solo están reservadas a profesionales del trading muy cualificados y experimentados.
Los nuevos inversores que quieran empezar a participar en los mercados deberán aprender como norma primordial sus conceptos, gráficos, operativas y herramientas básicas para operar y adoptar sus decisiones financieras. A la firme decisión de intentar ganar dinero en las bolsas de valores (por ejemplo), siempre le acompañará la también firme condición psicológica de saber que se está dispuesto a perder y para llegar a esta condición tan humana es imprescindible leer y entender entre otras muchas cosas, lo que es… “Un proceso emocional llamado inversión”.
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La frase elegida para este artículo dice así:
Los hombres inteligentes quieren aprender; los demás, enseñar.
Anton Chejov