Los seres humanos tenemos un lógico instinto de supervivencia heredado de nuestros antepasados y acentuado a través de los millones de años de evolución hasta llegar a nuestros días. Esto traducido al mundo de las finanzas nos ha ayudado a distinguir y considerar desde bien pequeños que la posesión de bienes materiales nos garantiza un bienestar físico y emocional que para otros individuos de nuestra especie les está restringido, (cuando no vedado), debido al anormal reparto de las riquezas en este nuestro planeta económico-financieramente globalizado.
Si se realizara una encuesta a pie de calle con la pregunta: ¿Usted prefiere ser rico o ser pobre? Las respuestas serían abrumadoramente positivas hacia ser rico, salvo raras excepciones, porque siempre hay gente rara por el mundo. Pero el concepto riqueza es muy relativo ya sea desde el punto de vista psicológico, emocional o político, y es que para parte de la clase política –por ejemplo- el hecho de que usted sea pobre, le facilita el realizar promesas de futuro bienestar a cambio de un buen puñado de votos.
Sin embargo para los empresarios, que no seamos pobres, les predispone a fomentarnos los hábitos de consumo mediante las ofertas de sus productos cada día más imprescindible en nuestra vida materialista y tecnológicamente avanzada. Por tanto, para que no debamos depender de otros agentes externos a nuestro propio criterio vital, deberemos dejar de ser “esclavos financieros”, y empezar por construir nuestro patrimonio personal con el fin de generar la independencia económica tan necesaria en este mundo actual donde convivimos todos los días sometidos a la economía de mercado.
Que el dinero no da la felicidad ya es sabido desde hace años, y que… el dinero no es un fin en sí mismo…¡¡también!! … Solo se puede considerar al dinero como herramienta o instrumento de independencia monetaria para poder decidir libremente que opción de vida queremos para nosotros y nuestros hijos, para ello, es esencial hacerse cargo de nuestras propias finanzas personales antes de delegar en otros, que con mayor o menor fortuna, manejarán nuestro capital y que en caso de graves errores o negligencias de inversión nos pueden sorprender con la famosa y muy actual frase: “Usted debería saber dónde se metía” (¿participaciones preferentes?).
PSICOLOGÍA INVERSORA: SER RICO O SER POBRE
Nadie tiene una bola de cristal o poder de adivinación suficiente para saber con antelación el resultado final de una inversión en los mercados de renta variable, por lo que el nivel de riqueza o pobreza personal alcanzado tras unos años de inversión, será relativo, dependiendo del entorno social en el que nos movamos, nuestras propia estrategia financiera y las aspiraciones materiales soñadas. Existen distintos niveles de riqueza o pobreza financiera mundial y se puede llegar a ser más pobre en las Vegas (EEUU) como indigente (por ejemplo), que en un poblado de Tanzania rodeado de vacas.
Por ello, la independencia financiera le proporcionará al inversor o ahorrador una adecuada protección ante las adversidades económicas, laborales, familiares o de salud, que les afectarán a lo largo de su vida y cuanto antes empiece a aprender, antes podrá manejar su dinero de forma autónoma, consciente, responsable y con evidentes posibilidades de éxito en los mercados.
Cuando volvamos a leer dentro de un tiempo prudencial la frase: “El significado de ser rico o pobre en las finanzas”, sabiendo que en este mundo nadie regala nada, ya deberemos tener conseguida la propia libertad financiera suficiente para saber qué nivel de riqueza podemos llegar a conseguir, y por consiguiente, que riesgos financieros estaremos dispuestos a asumir para llegar a alcanzarla.
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La frase elegida para este artículo dice así:
He sido rica y he sido pobre; ser rica es mejor.
Sophie Tucker
2 Responses to “Significado de ser rico o ser pobre en las finanzas”
Miguel A. Patiño
Muchas gracias Isabel,
Como puede usted ver, en esta sección de Consejos de Bolsa existen muchos y muy variados artículos sobre finanzas personales dirigidos especialmente, para los pequeños, medianos inversores y ahorradores o aficionados en general.
Seguiremos aportando nuestros conocimientos financieros para una mejor formación de nuestros lectores y seguidores.
Un saludo.
Isabel
Hola. Me encantaría poder recibir mucho más de su valiosa información. . Gracias