Existe una frase muy conocida y popular que dice así: “La fe mueve montañas”… y sobre este tipo de actitudes tan humanas vamos hoy a reflexionar, desde el punto de vista de los futuros pequeños y medianos inversores que actualmente se estarán planteando participar en los mercados de renta variable para poder obtener mayores beneficios por su dinero.
Para invertir en los mercados bursátiles es necesaria una adecuada formación técnica, pero ante todo hace falta adquirir, entender y asimilar una buena formación psicológica, para hacer frente a los grandes retos y riesgos financieros que acompañan lógicamente todo tipo de inversión en la Bolsa. Para seguir de forma didáctica con el mejor aprendizaje y poder llegar a alcanzar el éxito inversor veamos a continuación, algunos factores o comportamientos imprescindibles para lograr los objetivos dinerarios deseados y soñados por todos:
- ACTITUD POSITIVA: Para empezar a invertir en los mercados es primordial que el inversor tenga grabada en su mente la palabra… “SE PUEDE”… Mostrar una actitud positiva ante la inversión es la base del éxito y la confianza en uno mismo, les habilitará para poder mejorar día a día, corregir errores y volver a levantarse después de sufrir un revés financiero puntual.
- EVITAR EXCESOS DE VELOCIDAD: Uno de los errores más habituales en la inversión es el exceso de confianza y velocidad en querer ganar dinero muy deprisa. Invertir en sus inicios será cosa de medio-largo plazo, no cayendo nunca en la errónea creencia de ser “una mente privilegiada” por acertar en sus primeras inversiones.
- SABER DONDE INVIERTE: Parece cosa de “perogrullo”, pero son muchos los inversores noveles que tras los primeros éxitos bursátiles se aventuran erróneamente a realizar apuestas inversoras en instrumentos financieros de muy alto riesgo, como puedan ser los futuros, opciones, warrant…etc.
- EL VALOR DE LA EXPERIENCIA: Como casi todo en la vida, la acumulación de experiencias inversoras será la base del futuro buen trader, que loablemente pretenda mantenerse en beneficios a lo largo de un extenso periodo temporal.
- TENER UNA ESTRATEGIA CLARA: El orden, la planificación previa y la disciplina inversora en aplicación de una estrategia determinada son elementos muy importantes, para poder operar de la manera más fría y semi-profesional en los mercados de valores.
- PSICOLOGÍA INVERSORA: Tener una mente abierta, ser responsable y adoptar una adecuada actitud inversora les ayudará a saber adaptarse a las volatilidades de los mercados, obtener mejor capacitación psicológica personal, evitar miedos o pánicos y no caer en mayores errores financieros. Los mercados de Bolsa en ocasiones pueden llegar a ser excesivamente impredecibles, inestables o “puntualmente nerviosos”, y los buenos inversores experimentados suelen tener el temple suficiente y la preparación psicológica, para poder capear positivamente estos temporales que azotan los parqués de manera periódica al hilo de las llamadas “burbujas bursátiles”.
COMENTARIOS Y CONSEJOS
La formación inversora es la madre de todo tipo de participación positiva en los mercados para los bolsillos de los pequeños y medianos inversores y deberá ir acompañada de una clara actitud también positiva en cuanto a la propia psicología del inversor.
La mayoría de los errores cometidos por los inversores noveles suelen estar relacionados con el no saber mantenerse firmes en sus convicciones, mediante cambios de estrategias sobre la marcha, no vender cuando pensaban vender o bloqueos mentales ante las fuertes y rápidas bajadas en las cotizaciones de sus acciones.
Antes de poder llegar a sufrir estas situaciones tan negativas para sus intereses, los futuros inversores inteligentes deberán considerar y reflexionar seriamente al utilizar su dinero real la importancia financiera existente en: “Tener una mente preparada para el Trading”.
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La frase elegida para este artículo dice así:
Un trader debe estar dispuesto a trabajar tan duro y ser tan persistente como un atleta profesional para tener éxito.
Jeff Cooper