Hace algún tiempo me tocó estar presente durante la compra de un coche. Y según el comprador, no todo fue como había planeado. En parte porque no se había documentado lo suficiente. Pero el factor determinante fueron los trucos empleados por el concesionario.
A la hora de comprar un coche, hay que estar atento a las siguientes prácticas que pueden darse:
Haciendo malabarismos. Los vendedores suelen usar una hoja de trabajo en la que van anotando los términos del acuerdo. Es bastante fácil para ellos manipular alguno de los factores (precio de compra, entrada, pagos mensuales, tasación, etc).
Beneficiarse de las ofertas. Algunos vendedores usan la existencia de ofertas para manipular la psicología del comprador. No permitas que eso te ocurra aquí.
Inflar los pagos. Cuanto más estés dispuesto a pagar al mes, más margen tendrá el vendedor para trabajar. Es recomendable no hablar de la cuestión de los pagos mensuales hasta haber negociado el precio del vehículo.
Matriculación y extras. Si te ofrecen cualquier cosa después de haber negociado el precio, significa que probablemente no lo necesitas, y no deberías pagar por ello.
Subir el tipo de interés. Siempre es mejor que busques tu propia financiación cuando vas a comprar un vehículo. No es tan raro que el concesionario que ofrezca financiación a un determinado TAE suba el interés un 1% -y se embolse la diferencia. Por supuesto, siempre que exista la posibilidad de pagar en efectivo, hazlo, y no digas que piensas hacerlo hasta haber concluido las negociaciones. Saldrás ganando.
Alterar el contrato de venta. Algunos concesionarios dejan el contrato «abierto». No lo permitas. No firmes nada que lleve espacios en blanco o no tenga claramente especificados los términos del contrato. Asegúrate de que el papeleo está completo.
Recuerda siempre que las personas con las que vas a negociar en el concesionario se están ganando el sueldo. Aunque vayas armado con una buena información y con cierto conocimiento de los trucos de los concesionarios, sigues siendo susceptible de ser manipulado. Eres un negociador aficionado, y estás tratando con profesionales.
El truco que funcionó con el comprador que había mencionado al principio no figura en esta lista. Le atendió un hombre joven que sólo llevaba en su puesto dos semanas. Después de probar el coche, se sentaron a negociar. Consiguió que le rebajaran el precio de 17.000 € a 15.000, algo de lo cual se sintió bastante orgulloso. Pero entonces el vendedor fue a buscar a otra persona para que cerrara el trato, alguien cuya única misión era conseguir una cifra superior a esos 15.000 €. En resumen, estaba allí para hacer que pagara más. Y al final lo consiguió. El comprador pagó 15.600 €.
El vendedor joven le hizo una llamada de seguimiento a la semana de haber comprado el coche. Estaba llevando a cabo un sondeo y preguntaba qué le había parecido la experiencia. El comprador le dijo que todo había ido bien, pero que no le ha gustado tratar con la persona que llegó para cerrar el trato. Se había sentido manipulado. «Sí», respondió el vendedor. «No debió haberle escuchado. Habla mucho, pero en realidad quería vender ese coche».
Lección aprendida.
Si quieres seguir ahorrando más en tu coche, hecha un vistazo a los trucos que puedes emplear tras comprarlo. Y si hablas inglés, no dejes de consultar getrichslowly.org.
One Response to “Los trucos más comunes de los concesionarios de coches”
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