Comparativa de Bancos ofrece un plan mensual para mejorar tus finanzas. Todo lo que necesitas es una mente abierta y una hora diaria.
Hace dos días, determinamos tu verdadero sueldo anual. Ayer, se determinó el número de horas que realmente trabajas al año. Hoy, vamos a combinar los dos números, y examinaremos qué es exactamente lo que nos dice acerca de ti, de tu empleo, y de tu uso del tiempo.
¿Estás preparado para el gran cálculo? Coge el nuevo salario que calculamos hace dos días y divídelo por el total de horas que calculamos ayer. Nos va a quedar un número sobre el que vas a tener que reflexionar un poco.
Este número es la cantidad que realmente vas a llevar a tu casa por cada hora que hagas algo que tenga que ver con tu trabajo. Para algunos de vosotros, este número va a ser sorprendentemente bajo. Muchos, que aparentemente estáis bien pagados, vais a tener un salario por hora que está por debajo del salario mínimo si lo analizamos de esta manera. Por ejemplo, si tienes un salario que está por debajo del salario mínimo y pasas 60 horas en el trabajo o en actividades que tengan que ver con este, puede que sea mejor trabajar en IKEA con una responsabilidad mucho menor y con mucho menos estrés.
Muchos de vosotros puede que seáis reacios a la idea de trabajar en IKEA, pero escúchame hasta el final. Una pariente (y amiga) mía dejó un trabajo en el que ganaba unos 30.000€ al año para coger un trabajo en IKEA a 7€ la hora. En su nuevo empleo trabajaba cuarenta horas a la semana, iba y volvía en transporte público al trabajo, y llegaba a casa sin estrés. ¿Qué ocurrió? Volvió a tener tiempo para sus hobbies. ¿Y qué sucedió con su economía? Quitando los costes adicionales de su anterior trabajo, ahora le iba un poco peor que antes, pero si tenemos en cuenta la dosis adicional de energía y nada de estrés, podemos decir que en unos seis meses le iba bastante mejor que en su antiguo trabajo.
Reflexiona durante un momento lo que realmente significa este número. Este número nos va a revelar un montón de verdades sobre nuestra vida.
Si vas a comprar un capricho por X€, piensa cuantas horas tienes que trabajar para comprarlo. Supongamos que tú calculas que en realidad ganas 5€ por cada hora. Cuando vayas a comprar unos zapatos nuevos que cuestan 80€, pregúntate si merece la pena trabajar 16 horas para comprártelos. Cuando vayas a comprar un nuevo aparato electrónico por 300€, pregúntate si merece la pena trabajar 60 horas para ello.
Cuando tú pidas un préstamo, piensa cuántas horas tienes que trabajar para pagar los intereses. Creo que esto te va a hacer abrir los ojos. Cada vez que pagues la mensualidad del préstamo mira la cantidad que estás pagando por gastos financieros e intereses y ahora tradúcelo en horas de tu vida que has pasado trabajando. Con el ejemplo anterior, un gasto financiero de 100€ son veinte horas de trabajo que tienes que invertir antes incluso de comprar ese capricho.
Algunos consideran que este ejercicio es horrible, y otros lo encuentran revelador. La máxima de que el tiempo es dinero es dolorosamente cierta, por la traducción de cosas en las que gastas dinero en horas de trabajo, te das cuenta de que quizás no necesitas tantas cosas. Cuando empieces a hacer esto… bueno, ese será el ejercicio de mañana.
¡Continuamos el próximo día!