En este cuarto artículo de la periódica serie sobre las palabras y léxico más habitual en los mercados de valores y siempre, con la intención de mejorar la formación de nuestros pequeños y medianos inversores habituales seguidores de esta sección de Consejos de Bolsa seguiremos recuperando algunos conceptos que, mejor faciliten el entendimiento para las personas que se plantean participar mediante la inversión en renta variable para intentar conseguir mejores rentabilidades por su dinero.
En la actualidad y debido a la complejidad del mundo financiero es evidente que, los nuevos inversores precisan de unos conocimientos básicos para poder saber y entender los productos financieros que se les ofrecen en sus entidades bancarias o por el contrario, deberán depositar su confianza y su dinero en empresas especializadas (asesores financieros), que se los gestionen a cambio de unas remuneraciones pactadas y comisiones de gestión. Para continuar aprendiendo sobre el lenguaje financiero de “las páginas salmón” de los periódicos o las distintas webs de economía y finanzas existentes en Internet, hoy repasaremos de manera coloquial para todos que significan los términos: Renta variable, ETF, Plusvalía y minusvalía, Cesta de fondos, Defensor del cliente y Prima de emisión:
- Renta variable: La renta variable como su nombre indica es la que no le asegura una rentabilidad determinada por su inversión. En ella se incluyen productos financieros como son los fondos de inversión de renta mixta o variable y las populares, variables, sufridas y hasta en ocasiones muy rentables… ¡acciones cotizadas en la Bolsa!
- ETF: Es un instrumento financiero cuya finalidad es replicar un índice de referencia (IBEX35, DOW JONES…etc), con lo que permite al inversor acceder a todos los valores que lo componen. El ETF sigue el movimiento y las fluctuaciones del índice y su contratación es similar al de la compra-venta de acciones.
- Plusvalía y minusvalía: De manera básica diremos que son las ganancias o pérdidas dinerarias que generan nuestra operativa en los mercados. Sirva de ejemplo que si compran una acciones de la empresa “X” a 10 euros cada una y pasado un tiempo estas acciones valen a 12 euros, la diferencia de precio entre la compra de los títulos y su venta serán las plusvalías en este caso o por el contrario, si se precisan vender esas mismas acciones a 8 euros, entonces esas pérdidas se denominarán minusvalías.
Cesta de fondos: Son un conjunto de productos financieros (fondos de inversión) que sirven habitualmente como inversión estructurada para una mejor diversificación del riesgo inversor. Normalmente se asocian estas cestas de fondos a otros productos como pueden ser fondos garantizados, unit linked o seguros de vida). Se deberán adaptar al perfil inversor determinado de cada cliente.- Defensor del cliente (inversor): Su función principal es la defensa de los intereses de los inversores atendiendo sus quejas o reclamaciones, promover el buen uso de las prácticas financieras y sus decisiones de arbitraje deberán ser asumidas y respetadas por la empresa cotizada en Bolsa.
- Prima de emisión: Cuando se emiten nuevas acciones será la diferencia entre el valor nominal de los títulos y el precio al que actualmente se emite. La prima de emisión intenta que los nuevos accionistas paguen un poco más por los títulos, en beneficio de los actuales “inversores antiguos del valor”.
Todo conocimiento es poco a la hora de afrontar la experiencia financiera de la inversión en los mercados de valores y el aumento de posibilidades de éxito inversor suele ir acompañado de una cada vez, mejor formación técnica, mental y psicológica, para poder controlar la diferentes situaciones de incertidumbre y volatilidad que periódicamente se abaten sobre las bolsas. Seguiremos en un lenguaje lo más claro posible con esta referencia formativa, en otro post que titularemos: “Vocabulario financiero para inversores noveles V”.
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La frase elegida para este artículo dice así:
Puedes ganar muchísimo dinero si aprendes a no perderlo. La obsesión por ganar es el camino perfecto hacia el desastre.
Michael Duvan